sábado, 5 de mayo de 2012

Y las vidas son montañas rusas.

Alguien dijo que el amor era como una montaña rusa. Tenía razón, pero la vida misma es como una montaña rusa. Un día estás arriba del todo, tranquila, feliz, sin nada que te preocupe, otro día estás bajando por una cuesta grande, excitante con algo de miedo, sientes emociones muy fuertes que querrías sentirlos a lo largo del día, y finalmente estás abajo del todo, triste, queriendo volver a sentir lo que habías sentido anteriormente. Aunque sabes que para eso vas a tener que esperar al montón de gente que espera a volver a montarse en la montaña.
También había gente que decía que preferían vivir la vida sin altibajos, pero la verdad es que, sin altibajos, no hay vida.

No hay comentarios:

Publicar un comentario